Dibujos del medioambiente

El camino de las investigaciones científicas se cruza con el arte contemporáneo desde hace, por lo menos, tres décadas. Ejemplos sobran: hay artistas que dominan al detalle los secretos de la programación, de la robótica, incluso de la exploración genética, pero sus producciones no abren su discurso más allá un microsistema de académicos entendidos. La instalación Receptive Environments, del español Daniel Palacios, consigue enlazar los dos universos con astucia. El eje central de su creación es una caja de sensores que captura datos de los niveles de luz, temperatura, humedad, niveles de sonido, movimiento próximo, calidad del aire y polución, en un espacio al aire libre. Con esos datos pone en funcionamiento un sistema que dibuja formas orgánicas sobre láminas de madera.

La primera experiencia de Receptive Environments fue en la ciudad noruega de Trondheim, la idea era investigar en el campo de la visualización de datos, pero en un plano plástico, incluso de proyección pictórica. La caja de sensores permite interpretar cada variable de las mediciones en tiempo real, tanto sea en un bosque agreste como en el diseño de jardines modernos. Lo central, explica el artista, es que cada serie de piezas represente un momento y un lugar específico, que exprese en su desarrollo los movimientos invisibles del contexto.

 ©Mariela Dura arquitecta/homify.com.ar

Los gráficos –el resultado del proceso– se graban con láser en láminas de abedul. La intención es volcar una metodología puramente digital sobre un soporte tangible, relacionado en emociones y materia con el espacio analizado. El diálogo es de ida y vuelta con la naturaleza. Las formas finales, ramificadas y con apariencia vegetal, muestran un organismo en crecimiento que evoluciona paso a paso, una anatomía de las variables climáticas.

Cada cambio registrado modifica el proceso, a veces en detalles mínimos que ni por casualidad se perciben en bruto, pero que sí dejan su huella en las líneas que se unen para componer las ramas y los extremos florecidos de cada una de estas obras. El cuerpo conceptual, según Palacios, está en comprender y expresar que existe una diferencia en el uso de datos a nivel artístico y a nivel científico, pero que pueden unirse en el terreno de la experimentación.